Es el asado un plato internacional, celebrado y de celebraciones, tan tradicional como con posibilidades de innovación, dependiendo del cocinero todo es posible pero, siempre dependerá de la materia prima y del arte de asar y servir, por supuesto.
El plato de hoy es obra de la conocida y reconocida cocinera Albaceteña Teresa Gutiérrez, Chef y propietaria del Restaurante Azafrán de Villarrobledo, localidad de la provincia de Albacete conocida internacionalmente entre otras cosas por sus buenas tinajas de cerámica y sus grandes vinos Denominación de Origen La Mancha. Cordero asado y deshuesado, algo que parece tan sencillo y que precisa de tanta experiencia y mano con los pocos e intensos condimentos que precisa, temperatura y tiempo harán lo demás, solo queda arrimarle un buen vino D.O. La Mancha y Pan, artesanal, de masa madre.
Las fibras del cordero se separan, sabor intenso, sabroso, con la garantía del Azafrán, a esto le arrimo un vino tinto, envejecido en barrica, apuesto que un Cencibel Reserva Denominación de Origen La Mancha puede ser una muy buena opción de maridaje o armonía, como más te guste llamarlo. La variedad de uva tinta Cencibel es la sinonimia de Tempranillo, igual que en otras regiones la llaman ojo de liebre, tinto fino, tinta de toro… Esta variedad es la reina en cuanto a vino tinto envejecido en barrica, y este es el caso, porque un vino tinto reserva D.O. la Mancha tiene una crianza mínima en barrica de roble de 225 litros de 12 meses y posteriores 24 en botella antes de salir al mercado, por eso se llaman popularmente tercer año.
Este vino que comento estará idealmente servido en copa de cristal fino, amplia, con forma de tulipán o llamadas tipo burdeos, a una temperatura fresca cercana a los 14º, poco a poco dejando se atempere y oxigene y demuestre su agradable evolución en la copa, para disfrute bocado a bocado, sorbo a sorbo.
[…] Cordero asado en armonía […]