Recuperamos la receta tradicional de uno de los guisos más conocidos en La Mancha cuando se acerca la temporada de la vendimia.
Contenidos
Caldillo de vendimia o ajo patata
La riqueza antropológica de la viticultura en La Mancha se refleja también en su popular recetario y por ello, no resulta extraño encontrar a este guiso de caldillo con, prácticamente idénticos ingredientes, y similar receta, pero nomenclatura distinta. Por ejemplo, en municipios como Alcázar de San Juan, a los guisos de caldillo, se les conoce como ‘ajo patata’, responde a las mismas características de guiso con cuchara, que tanto apetecen cuando el mercurio da un respiro en las temperaturas, y la manga larga se agradece.
No es difícil imaginar la estampa manchega de aquellas cuadrillas que comparten descanso al calor de un trébede, unas gavillas y la buena mano del capataz en la sartenes para cocinar un caldillo.
Ingredientes
Precisamente aquí reside el encanto y sabor de aquel caldillo, cuando antaño, se recuperan directamente del campo, los ingredientes más cercanos como las patatas de la huerta y las hortalizas. Solían ser guisos sencillos y humildes que apenas llevaban algún porción de magro. Se dan variantes más actuales que aportan pescado (bacalao, la mayoría de las veces), y encuentran relación con el conocido marmitako (con bonito) de los pescadores vascos.
- Conejo/ cerdo o bacalao
- 5 patatas
- 2 dientes de ajo
- 1 pimiento verde
- 1 tomate
- 1 hojita de laurel
- Una cuchara de pimentón dulce
- Un chorro de vino blanco
- Aceite virgen extra
La afición ha querido mantener estos guisos midiendo incluso la pericia del cocinero en concursos. Son numerosos los municipios donde se solía celebrar un concurso para elegir al mejor caldillo.
Desde luego que cada cual podrá tener su “propio librillo” para encontrar el punto sabroso. Esa variedad, ha hecho, ha aportado, si cabe, una mayor riqueza al plato, hoy día. Como también son las propuestas de armonía que pueden encontrarse junto a una copa de vino DO La Mancha. Realmente, son válidas las otras opciones (blanco airén, joven tempranillo o crianza), aunque optamos por los aromas terciarios de un crianza en eso de recordar sabores tradicionales de vendimia.