A la hora el aperitivo o por la tarde siempre apetece un aperitivo, y los de la fotografía son todo un clásico, guijos, chícharos, almortas o titos, todos los nombres para el mismo producto, leguminosa fabácea que ha sido y es un alimento tradicional, por desgracia casi extinto pero que creo poco a poco los jóvenes conocen y defienden por su versatilidad y singularidad. Se tiene constancia del uso de las almortas en India hace cuatro mil años, en España mucho menos pero su harina es utilizada para las famosas gachas, en verde han sido también alimento y fritas, como en la foto, uno de los aperitivos más tradicionales de La Mancha.
Su textura crujiente e intenso sabor salado invitan a disfrutarlo junto a una bebida fresca, es habitual el vermú tan tradicional y que muchas bodegas elaboran artesanalmente. pero un seguro servidor vuestro incita siempre a disfrutar de los buenos vinos de la Denominación de Origen La Mancha, así que para este «snack» tradicional propongo un vino rosado, pero no uno cualquiera, el siguiente:
En una copa de cristal fino, mejor si tipo chianti, serviría un vino rosado joven de la variedad Syrah, goloso y fragante, maduro y complejo, a unos cinco grados centígrados, poco a poco para evitar se caliente el vino en la copa. El vino rosado joven es recomendable consumirlo preferentemente en el mismo año de su cosecha para aprovechar todo su potencial aromático, siendo indispensable la buena conservación y servicio del vino para poder disfrutar de sus propiedades al máximo, conservándolo en lugares frescos, aislados de luz solar, sin vibraciones y en este caso evitando el contacto del corcho con el vino.
Bebe buenos vinos de la Denominación de Origen La Mancha bien servidos y en buena compañía, saben aún mejor!
Salud y ¡mucha Mancha!
